El bótox es una sustancia que se utiliza en pequeñas dosis para tratar
diferentes condiciones médicas y estéticas.
En general, se considera que la aplicación de bótox es segura cuando se realiza por un profesional capacitado y certificado, y se siguen las recomendaciones de dosificación y técnicas de aplicación adecuadas.
Sin embargo, como con cualquier procedimiento médico, siempre hay ciertos riesgos asociados con el uso de bótox. Estos pueden incluir:
–Dolor, hinchazón o hematomas en el lugar de la inyección
–Dolor de cabeza o síntomas similares a los de la influenza
–Párpados caídos o cejas desparejas
–Sonrisa torcida o babeo
–Sequedad ocular o lagrimeo excesivo
Es importante que cualquier persona que esté considerando la aplicación de bótox hable con un profesional médico calificado y experimentado y discuta sus preocupaciones, antecedentes médicos y cualquier medicamento que esté tomando. También es importante seguir las instrucciones de cuidado posteriores al procedimiento para minimizar los riesgos y maximizar los resultados.
El bótox solo se debe utilizar únicamente bajo supervisión médica. Es importante que las inyecciones se coloquen con precisión para evitar efectos secundarios. La terapia con bótox puede ser peligrosa si se administra de manera incorrecta. Pídele una derivación a tu médico de atención primaria, o bien busca un médico que se especialice en tu enfermedad y que tenga experiencia en la administración de tratamientos con bótox.
Un médico capacitado y adecuadamente certificado puede aconsejarte acerca del procedimiento y ayudarte a determinar si es lo que mejor se adapta a tus necesidades y a tu salud.
Se ha demostrado que el bótox es seguro, ya sea a corto plazo o de manera prolongada, aunque los datos sobre el tratamiento de las arrugas con bótox apenas se remontan a alrededor de 15 años.
Si bien la dosis necesaria para las arrugas es mucho menor que la administrada para otras afecciones, como la espasticidad muscular, no ha habido problemas importantes de seguridad con este medicamento en quienes reciben dosis más altas debido a esos otros problemas; eso sustenta aún más la seguridad del bótox.